Por fin un proyecto creado por Robert Kirkman que no decepciona a la mitad de la temporada y es que el creador del cómic de The Walking Dead puso toda su energía en esta serie animada basada en su violento superhéroe Invincible.

Quería esperarme a que terminara la temporada porque esta es una que te sorprende capítulo por capítulo y hay que disfrutarla sin sobre analizar si esto conecta con aquello o si tal personaje del cómic va a aparecer de la nada y funcionó porque es un deleite verla progresar y ver a Invincible completar el arco formativo de su historia.

Por si no la han visto les cuento que Mark es un adolescente como cualquiera en un mundo donde los superhéroes existen excepto que la realidad es que Mark es hijo del más poderoso de todos: Omni-man. Cuando por fin le nacen sus superhabilidades, cree que será facilísimo pero pronto se da cuenta de que se requiere entrenamiento y la vida no es como una historieta.

Eso es lo que separa a Invincible de muchas otras series, la realidad es lo que asienta la historia, los golpes duelen y las personas no son tan buenas o malas, los personajes tampoco están ahí para servir a Mark de respaldo, tienen sus propias historias y sus propios problemas más allá de la historia central y la serie lo maneja bastante bien para no hacerlo aburrido.

Las voces en inglés, ¡por favor vean esta serie en inglés o se van a perder de mucho!, vienen de un elenco de primera, con actores conocidos y que varios son veteranos en esto de prestar sus voces como Mark Hammil y JK Simmons. Steve Yeun (recién nominado al Oscar y que también participó en The Walking Dead) sobrepasó mis expectativas como Invincible, en especial durante los momentos más dramáticos.

Invincible es tremenda, no cometan el error de considerarla para niños porque es todo menos eso, el villano final hace ver a Thanos como un Emo púrpura en comparación. Esta serie bien podría unirse a aquellas como Batman, Superman, Young Justice y Justice League.

9/10

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