Tras la recomendación de un compañero del trabajo decidí a ver a Retsuko, un pandita rojo que vive una vida promedio pero que guarda un terrible secreto, después de esconder todo el coraje que su día le trae visita el karaoke para sacar todo aquello que la enoja en medio de canciones de Death Metal. La serie tiene momentos genuinamente graciosos donde las risas salen pero lo maravilloso de este anime es la manera tan simple en la que tratan situaciones con las que cualquiera de nosotros se puede relacionar.
La primera temporada se enfoca en la vida laboral y como todo aquello que sucede en el trabajo nos afecta de una u otra manera, podrás encontrar a todos tus compañeros dentro de este mundo pues en cualquier empresa están los singulares personajes que hacen de la vida de Retsuko una aventura diaria, en estos 10 capítulos vemos los sacrificios que se hacen para cumplir con el trabajo pero sobre todo lo cansado que es ser parte de la estructura empresarial donde se deben aguantar jefes extremos o tareas imposibles.
La segunda se va por un camino totalmente diferente y se enfoca en la vida amorosa de este personaje, demostrando la falta de interés o la mucha necesidad que se vive en Japón respecto al amor. Retsuko analiza ese amor ciego pero doloroso del que nos mentimos constantemente y aquel que suena perfecto pero que en realidad no es para nosotros debido a las diferencias ideológicas de cada uno. Durante sus episodios deja que todos sus personajes naveguen en este sentimiento y den sus diferentes puntos de vista.
Finalmente la tercera temporada da un giro distinto y le permite a Retsuko explotar su talento y vivir su sueño, una temporada complicada con un final bastante extraño pero que nos da mucho de que hablar, un complicado análisis de lo que son los sueños, de como en ocasiones son una cosa que se vive una vez pero que no te llena de la manera que esperabas o al contrario son cosas por las que uno tiene que trabajar demasiado. Vivir tu sueño no significa éxito o satisfacción total, puede ser también la oportunidad de ver que realmente lo que buscas es lo que ya tienes.
Aggretsuko es una grata sorpresa que merece ser vista en más de una ocasión para no solo reírnos de la vida cotidiana sino que nos da la oportunidad de pensar un poco en nuestra persona pues lo que parece una serie cómica hace un trabajo bastante bueno en exponer la crueldad de la vida actual.
9/10