Eddie Murphy regresa al personaje que lo vio nacer después de 33 años, en una de las secuelas más innecesarias del planeta, con un giro bastante interesante que la hace una de esas películas que nadie pidió pero funciona. Murphy tiene esto en mente, cuando decide tratar de seguir esta historia e inclusive hace varios chistes acerca de cómo Hollywood a perdido esa creatividad de antes, pero eso no lo detiene para brindarnos grandes momentos de risas que nos recuerda mucho a la cinta original.
Aquí vemos aún Eddie divirtiéndose mientras hace todas las locuras que se le ocurren, trayendo a casi todo el elenco original de regreso pero sobre todo entendiendo perfectamente que la comedia ha avanzando, que la época es otra y debe ser más cuidadoso; le brinda la oportunidad a los nuevos de tomar la batuta de esta historia. Detrás las risas tenemos una historia sobre recordar aquello que nos hizo grandes de jóvenes, esas ganas de romper las reglas para cambiar el mundo que a veces al llegar a una edad adulta hemos olvidado debido a la monotonía de esta sociedad.
Coming 2 America funciona exactamente igual que su predecesora, tenemos una increíble secuencia inicial y los primeros 40 minutos son únicos, pasando esto la historia se estanca un poco hasta que llegamos al final clásico de Hollywood. Lo mejor que Murphy hizo fue darle un papel a Leslie Jones, quien nuevamente se corona como una de las comediantes más importantes de la nueva generación, no hay un solo momento que está mujer no se robe la pantalla. Sin ser perfecta Coming 2 America es divertida y cumple con lo que promete.
8/10