Hoy en día está muy de moda la «cultura de la cancelación» y aunque su propósito es benéfico para exponer a personas homofóbicas, racistas o violadores, hay días en los que parece enfocarse en los peores casos.
El más reciente sucedió este fin de semana cuando un artículo publicado en The New York Times pidió la cancelación del personaje animado Pepe Le Pew de los Looney Tunes.
Pero creo que la persona que escribió el artículo no entiende el trasfondo del personaje creado por Chuck Jones como una parodia a Ted Pierce, su compañero de animación que creía que su actitud de Cassanova era siempre recíproca.
En cualquier caricatura de Pepe Le Pew el personaje -un zorrillo, por si se necesitaba algo más sutil- asume que la gatita, a la que los fans han optado por llamar Penélope Pussycat, está coqueteando con él con cualquier cosa que hace.
La forma en que Pepe se acerca es como la de cualquier hombre que se siente galán, forzando sus brazos en la gatita y creyendo que un no es «si».
Chuck no estaba diciendo que el personaje era chistoso sino que lo chistoso era que él pensaba que eso era correcto, en otras palabras: era una sutil crítica a la actitud de varios hombres hacia las mujeres.
Si, se trata de acoso, pero ni el escritor de NYT ni esta generación están descubriendo nada nuevo (el artículo también se va contra Speedy González y ¿cuánto tiempo se tardó un mexicano en darse cuenta de que Speedy es un insulto?).
Chuck Jones y los Looney Tunes son los padres del humor subido de tono, pero en más de una ocasión han demostrado tener el dedo en el pulso de la sociedad. Claro que se cometieron errores, hay un par de caricaturas donde Bugs sale usando Blackface y otros donde la descripción de ciertas culturas no es la mejor, pero si vamos a separar qué se hizo bien y qué no, entonces pongamos el reflector en las canciones de Francisco Gavilondo Soler «Cri Cri» quien también tiene un fuerte problema de racismo heredado por los tiempos en los que vivía.
Desde hace ya varias décadas el personaje ha pasado de ser secundario a una aparición especial en los proyectos de los Looney Tunes, siendo los más importantes su papel de mentor de Fifí Le Fume en Tiny Toons -donde curiosamente el rol de acosadora se diluyó a un simple «zorrilla que se enamora de todo»- y como Louis en la excelente parodia de Casablanca, «Carrotblanca», pero su actitud fue reducida al nivel más bajo.
Es por esto que «cancelar a Pepe Le Pew» ahorita suena a distractor, a alguien que no tenía nada que escribir y decidió hacer algo gigante de un personaje olvidado hace más de 25 años.
I’m Out!!!!!