Con esta pandemia del coronavirus, se está recomendando no salir a lugares concurridos y yo les voy a hacer la misma sugerencia pero para que eviten ver esta película. Tampoco habrá mucha gente en la sala donde proyecten la nueva aventura de Vin Diesel fuera de la franquicia de Rápidos y Furiosos, la función a la que asistimos ayer estaba casi vacía y eso te dice todo lo que necesitas saber.

Bloodshot fue uno de los buenos cómics de los exagerados 90’s fuera de las dos grandes marcas, al igual que Nighthawk o The Darkness y cuenta la historia de un soldado que ve a un terrorista asesinar a su bella esposa y tras una exitosa operación que llena su cuerpo de robots nanites que repararán su cuerpo de cualquier ataque, él decide salir en busca de venganza ¡aah pero ese no es el twist!

Confía en que Vin Diesel arruinará una gran premisa con una actuación monótona en donde el hombre solo tiene dos tonos de voz: gritar y murmurar a tal grado que no entiendes lo que dice.

La película se siente más como una que debió estrenarse en los 90s pero llegó hasta ahorita, con efectos tan malos que por momentos, el doble de acción creado por computadora parece más Jason Statham y no Vin Diesel, además cuando tu historia tarda 50 minutos en arrancar y dura menos de dos horas, sabes que tienes un serio problema.

Llegó un momento en el que estábanos tan aburridos con lo que había ennla pantalla que mejor nos pusimos a platicar y hacer chistes, cosa que no nos había ocurrido en mucho tiempo.

Si no tienen que salir a algo verdaderamente importante, eviten perder su tiempo con este bodrio.