
Sinopsis: Beau (Joaquin Phoenix) es un hombre que teme a todo y ahora debe tratar de llegar al funeral de su madre.
Opinión: Ari Aster es uno de los grandes directores de los últimos años, su trabajo en Hereditary y Midsommar son envidiables y redefinieron el «terror elevado» del cine, pero siento que con su más reciente película quiso tocar demasiados temas y solamente terminó contaminando una trama que pudo haber sido grandiosa.
Beau es otra de las exageradamdente artísticas interpretaciones de Joaquin Phoenix, un hombre consumido por el terror de un territorio hostil que poco a poco va desenredando la relación tóxica que tenía con su madre, el problema son las tangentes que Aster toma para llegar a este tema, tangentes que la convierten en una parodia de cualquier parodia de una película artística.
Aster sacó su lado más snob, su versión más «Terrence Mallick tiene sexo violento con Alejandro Iñárritu y Truffault sobre hojas rotas de la enciclopedia británica mientras un payaso desnudo (claramente la representación del capitalismo) les avienta brochazos de pintura naranja mientras una mujer pintada con Jesucristo les grita que todo esto es su culpa» y espera que la audiencia se siente por tres horas para llegar al final y ver la única escena que describe el conflicto y salgamos exclamando «aaah claro, la mamá era la tóxica y el viaje es nuestra dependencia a la figura materna y la falta de figura paterna, claro, ¡¿como no entendí eso una hora antes durante la obra de teatro junto al hombre catarina y la máquina de arcoiris?¡»
No sé, tal vez faltó que Tilda Swinton estuviera narrando mi experiencia cinematográfica al ver esta película mientras Meryl Streep, disfrazada como mi cubeta de palomitas, daba un monólogo sobre El Infierno de Dante y su relación con mi respuesta narcoleptica a esta cinta que ocupa una hora junto a Nathan Lane evitando llevar a Phoenix a su casa pero no viendo como su depresiva hija adolescente bebía pintura para expresar su frustración ante la idea de Beau remplazando a su difunto hermano.
¿Si van captando mi crítica o le falta cultura a sus mediocres mentes encerradas en una prisión de cartón? Tal vez si hubieran leído toda la postura de Freud sobre el abuso maternal enrenderían que claramente el hombre con estrés post traumático que persigue a Beau para matarlo es una representación de sus responsabilidades socioculturales como hombre.
Por supuesto que no esperaba que Aster repitiera el terror que funcionó en sus películas anteriores, no una tercera vez, pero «Beau is Afraid» es otra clase de terror, ese que causa una comedia oscura que te pide que entiendas porque hay un pene gigante eyaculando en un sótano y como este representa el miedo que Beau tiene a la sexualidad y como todo fue plan de su traumada madre…pero antes, acompañemos a Beau por una obra de teatro de una hora sobre un futuro de fantasía con sus tres hijos adultos o tal vez solo se trata de un reclamo de su madre a su absurda idea de vivir solo y el hombre sapo representa el acostón que ocasionó el nacimiento de Beau y su sufrimiento es solo una construcción abstracta de su madre para evitar pasar el resto de su vida sola. No lo sé, puede ser, todo es confuso y tal vez el ángel con máscara de papel maché no tiene todas las respuestas, mejor deja que un coro de niños ucranianos cante tu canción favorita mientras te pierdes pensando «¿qué hago aquí? Claramente la película es horrible ¿entonces porqué no me hé ido? ¿Acaso tengo miedo de ser juzgado socialmente como el único que abandonó la sala? ¿Qué dirá el rumiante de palomitas del asiento C-8? ¿Pensará bien de mí? ¿Me recordará en un futuro cuando se encuentre en su lecho de muerte?»
Cuando finalmente la vaca espacial y yo pudimos escapar de la Reina Durazno y armamos nuestra nave espacial con hojas secas y lágrimas de peces, salimos volando gentilmente de Marte con destino a la Tierra, felices de haber aceptado que nuestro amor no se fijaba en etiquetas de hombre o vaca, solo…éramos… y con esa alegría saliendo de mi cuerpo decidí ponerme de pie y caminar, Meat Loaf me gritaba «no, detente, tienes que salvar a Pirrín» pero Joaquín Phoenix estaba todavía sufriendo en pantalla siendo enjuiciado por los celos de su madre y yo no sabía quien diablos era Pirrín.
Era libre, la pesadilla había terminado y cada paso que daba lejos de esa mediocre experiencia cinematográfica me acercaba de nuevo a mi cordura. Pagué mi boleto y aunque la máquina escupía mi billete de 20 pesos diciendo que no le sabía a gasolina de chocolate, hablé firmemente con ella y tras un duelo de ajedrez comprendió mi dilema y me dejó ir, hasta que por fin llegué a mi casa y viendo como mi hijo vaca viajaba por el firmamento, exclamé:
«CARAJO, BEAU IS AFRAID ES DEFINITIVAMENTE LA PEOR PELÍCULA DEL AÑO»
5/10 (aunque qué significa una calificación en nuestro baile por el mundo?)
I’m Out!!!!!