Sinopsis: La historia de dos talentosos músicos y la banda que su toxicidad no pudo llevar a la fama.

Opinión: Este es el ejemplo perfecto de como «menos es más». Daisy Jones and the six está basada en el popular libro del mismo nombre sobre una banda en los 70’s que pudo ser la más grande del mundo pero sus secretos y celos se volvieron una bomba de tiempo.No he tenido el gusto de leer el libro así que no me voy a fijar en si la adaptación es fiel o no. Mi crítica será solamente de la serie y porque, a pesar de sus clichés y sus problemas, esta serie logra lo que muchas otras trataron de hacer.

Desde el principio es bastante obvio que la historia está inspirada en parte por la caótica relación de amor y odio entre Lindsey Buckingham y Stevie Nicks y todos los problemas dentro de Fleetwood Mac, no es necesariamente una biografía donde solo los nombres fueron cambiados, pero es bueno que las nuevas generaciones sepan que Fleetwood Mac fue una tremenda banda, de las mejores de su época, pero que sus integrantes eran una telenovela con patas.

Riley Keough, nieta de Elvis e hija de la recién fallecida Lisa Marie, da una de esas actuaciones por las que, de ahora en adelante, van a recordarla como ese personaje. A pesar de que su look da una vibra de Florence Welch, Riley hace a su Daisy una mujer talentosísima que deja que su sufrimiento sea la base de su actitud ante la vida, su evolución como compositora y su eventual romance intelectual con Billy Dunne es tan bien llevada que a los 5 minutos olvidas todo tu morbo por ver si la nieta del Rey sabe actuar o cantar y al terminar los diez capítulos la abrazas como a una de las actrices más impresionantes del año.

Recuerdas al chico de películas románticas de poca monta…o a quién estoy engañando ¿recuerdas a Finnick Odair en Los Juegos del Hambre? Pues prepárate para olvidarte de él porque Billy Dunne es toda una verdadera creación, un hombre talentoso pero verdaderamente roto luchando contra su terror de caer de nuevo en tentaciones de alcohol y drogas pero al mismo tiempo no puede negar que esta vida de música y excesos le encanta porque ama la música. Creo que lo que más me gusta es como Sam Claflin interpreta a Billy como alguien que siente una pasión por Daisy pero su corazón está dominado por el amor hacia Camila.

Y eso es parte de lo que esta serie logra hacer mejor que otras, específicamente aquellas sitcoms donde el tóxico y la tóxica se quedan juntos al final solamente porque los fans lo desean. Ejemplos: Friends y How I Met Your Mother.

Me tardé años pero llegó un momento donde comprendí que apoyar relaciones como Rachel y Ross o Ted y Robin, es lo peor del mundo! Si, Daisy y Billy se ven muy bonitos juntos y hay una química tremenda entre ellos pero son como La Luna y el Planeta Tierra, se ven hermosos juntos pero si la luna se acerca más, destruye a la Tierra. Así Billy con Daisy, ambos son tóxicos, pero Billy siempre está luchando por ser mejor para Camila (el ÁNGEL de esta serie), mientras que Daisy necesita un golpe de realidad para entender que ella puede hundir a Billy más de lo que él puede herirla, por muchas razones es que estos dos deben estar separados y la serie, a pesar de sus últimos segundos, entiende que más allá de amigos no pueden ser.

Hablando de Camila, que refrescante es ver que la «tercera en la relación» es víctima pero jamás se hace la víctima ni dejan que la lastimen de más. A diferencia de las miles de películas o series donde «la esposa» termina siendo olvidada en favor de la amante. Camila es un ángel, siempre el balance no solo de Billy sino de la banda en general, su relación con Karen y Daisy, los pequeños roces que tiene con el resto de la banda, su secreto, rara vez se escriben personajes así.

Pero estamos hablando de una banda ¿y qué hay de la música? El que hayan hecho que los actores aprendieran a cantar y tocar sus instrumentos para luego hacerlos grabar un disco, sube el nivel de calidad de la serie 100%, las sesiones de grabación se sienten reales, los conciertos tienen una fuerte energía y puedes ver que cuando los dejan no tener problemas fuera del escenario, los mismos actores sacan a relucir lo bien que la estan pasando al dar conciertos…porque oh sí, se les obligó a dar un concierto frente a una gran audiencia una vez para probar que funcionaban como banda ¡y el resultado fue que el disco de la banda falsa está ahora entre los más escuchados en Spotify!

No es una serie perfecta pero Daisy Jones &The Six es una excelente forma de darle nueva vida a un tema tan trillado en cine y televisión. Esta fake band (que próximamente podría no ser tan fake) merece ser mencionada entre las más memorables fake bands del cine como Spinal Tap o The Blues Brothers, detrás del escenario, Riley Keough y Sam Claflin dan las actuaciones más genuinas y memorables de sus carreras pero el resto del elenco brilla con luz propia y brilla bastante. Vas a reír, vas a llorar, te encontrarás tomando lados en las discusiones y definitivamente te vas a obsesionar con esas canciones.

10/10

I’m Out!!!!!!