
Tal vez hayas sido parte del fenómeno mundial, tal vez tu primera vez fue en la televisión o en dvd/bluray, tal vez apenas la descubriste en streaming pero algo que nadie ha podido negar en 25 años es que Titanic cambió el juego dentro y fuera de la industria del cine.
Los 90’s fue una de las décadas más interesantes de la historia del cine gracias a que había de todo para todos la vieja guardia, esa gama de actores y directores que cambiaron al cine en los 70’s ya estaban tomando su lugar como leyendas, la locura comercial de los 80’s estaba pasando y el cine no se trataba de franquicias sino de géneros.
Fueron los años de Julia Roberts y Hugh Grant dominando el romanticismo, Sharon Stone liderando el thriller erótico, más cineastas de color estaban plasmando su día a día en la pantalla, Steven Spielberg no podía fallar en cine blockbuster o drama y nadie te doblaba de risa como Jim Carrey. Todo iba «de acuerdo al plan» para Hollywood hasta que el director de dos de las franquicias más populares de ciencia ficción decidió espantar a todos cambiando al género romántico.
Como siempre, fans, periodistas y críticos reaccionaron con las mejores intenciones, escribiendo párrafo tras párrafo en periódicos, revistas y esa cosa nueva llamada internet sobre el riesgo tan absurdo que James Cameron estaba tomando, sobre la trsiciones a millones de fans que lo siguieron con Terminator y Aliens ¿cómo era posible que alguien como él trabajara con el galancillo juvenil del momento y una chica de la que nunca habíamos oído hablar? «Esto sin duda será el mayor fracaso del año».
Bueno, ahora sabemos que esos críticos, reporteros y fans estaban equivocados, Titanic no solo fue un éxito, fue una bomba nuclear como nunca se había visto antes.
Si algo se puede decir de Cameron es que sabe atraer a la audiencia porque el público general quiere ver algo que los haga sentir de todo y Titanic logra eso en tan solo tres horas.
¿Quieres un misterio simple? Ahí está la historia de que hizo la viejita con el collar
¿Quieres una lección de historia entretenida? Los primeros 20 minutos te sirven para saber sin rodeos como se hundió el barco
¿Quieres diferencia de clases sociales? Cameron pone con lujo de detalle la vida de la primera y tercera clase y sabes que lo hizo bien cuando en el cine el público siempre se ríe en el momento que Cameron corta de golpe de la fiesta musical donde Jack y Rose bailan felices a la aburrida vista de los ricos fumando y hablando de finanzas.
¿Quieres romance? Tienes el romance más irreal, de momento y rosa de todos los tiempos. No es una historia nueva, hay millones de libros escritos antes y después de Titanic, hay miles de películas y por supuesto toda telenovela desde Rosa Salvaje hasta Betty la fea tratan de lo mismo. Pero ese es el punto, el romance no debe tener complicaciones, debe enganchar al público para crear debate y sentimientos sobre como «Rose es una tonta por echar a perder su vida con un tipo que no tiene dinero» y «es que tu no sabes de amor verdadero. Jack y Rose forever»
¿Te aburres de que tu novia o esposa te haga ver películas románticas bobas? No te preocupes, la última hora es un festín de acción, muerte y destrucción con efectos especiales fuera de este mundo y para cuando Rose suelte la mano de Jack hasta tú vas a soltar una lágrima.
Titanic es Shakespeare, es Romeo y Julieta en su versión más pura, es «algo para todos» para demostrar que «todos merecen entretenerse». Es la clase de cine que solo James Cameron sabe hacer en la actualidad pero que Hollywood hacía regularmente en la Edad de Oro. Cameron nos recordó los espectáculos que nos hicieron amar el cine, esos grandes momentos épicos que citamos una y otra vez pero que jóvenes como Brian de Palma, Scorsese y Spielberg quisieron cambiar a pesar de que también los inspiró. Es cine de Lean y O. Selznick.
Podemos analizar por horas lo simples o complejos que son los personajes, los detalles cuidados con recelo para honrar al barco, sus lujos y sus pasajeros más famosos (y otros desconocidos) pero más que nada es una de esas películas que puedes ver una vez para prestar atención a esos detalles y otra para simplemente disfrutar, algunas serán para recordar momentos gratos, otras para volver a verla después de años o tsl vez por primera vez para saber porque diablos fue la película más taquillera por 12 años sin competencia (hasta que Cameron regresó para quitarse él mismo la corona).
Titanic detrás de cámaras se volvió la referencia para futuros cineastas: «fíjate como emplea la luz», «no cometas estos mismos errores», «trata de escribir algo mejor», etc. Etc.
Hizo carreras para Leonardo DiCaprio y Kate Winslet quienes rompieron con el molde y demostraron ser mucho más que «la parejita de esa película romántica». James Cameron probó a los estudios que los efectos visuales de computadora podían ser usados más allá de monstruos, ciencia ficción, fantasía o dinosaurios y que películas de menor escala también podrían beneficiarse para ser más de lo que soñaron ser.
Incluso Celine Dion, una MEGA estrella con 20 años de carrera, obtuvo un segundo impulso con el tema más escuchado de la historia del cine, que al día de hoy se sigue usando en redes sociales como Tik Tok.
Películas como Gladiador, El Señor de los Anillos y muchas otras no existirían como las conocemos de no ser por el «Rey del mundo» y su «arriesgado cambio al cine romántico».
Por cierto, a Leonardo DiCaprio no le importa, Kate Winslet asegura que era imposible y ahora James Cameron jura que era científicamente imposible que Jack y Rose cupieran sobre ese pedazo de madera.
I’m Out!!!!!