Por un mes he tenido que soportar a los trolls más haters criticando cada detalle de cada capítulo como si sus mentes no diera para más. Hoy, ni ellos podrán decir nada malo de este capítulo. Y si lo hacen es porque les gusta la atención y la mala televisión.

Enfocarse exclusivamente en la batalla de Ostirich fue todo un acierto y además es claro que buscaban llegar al momento «Helm’s Deep» de la serie, pero los escritores lograron dar unos muy buenos giros. Hicieron de Arondir un verdadero héroe y más creíble que Legolas pues aquí no hay Olifante que valga por uno ni brincos de Super Mario, también resaltaron su devoción al Bronwyn y la conexión que él y Theo ahora tienen.

Los orcos siguen siendo la estrella más brillante de la serie, se saben monstruos y sus acciones dan bastante miedo pero Adar ahora si demostró su reputación, que diálogo se avienta con Galadriely que manera de ganar la batalla aun cuando estaba perdida ¡por fin sabemos el propósito de los túneles!

Si el principio de la batalla me recordó un poco a Helm’s Deep, la llegada de los Numenorianos es básicamente la llegada de los Rohirrim en ROTK aunque en menor escala, fue un capítulo con buenos momentos de acción, ese detalle de engañar a los humanos para hacerlos pelear con los traidores fue *chef’s kiss*

En serio están llevando el misterio de Sauron al extremo, sé que será la gran revelación de la temporada pero hoy si jugaron con nosotros intencionalmente.

Curiosamente estaba yo quejándome de que la resolución fue algo apresurada, Halbrand aceptando ser «El rey que fue prometido» y Galadriel siendo bastante amenazante con Adar pero nada me preparó para el momento final, que fue literalmente explosivo. Ambas historias pagaron muy bien al final y ahora de unirán en destino. No puedo esperar a ver que pasa con los dos últimos capítulos de una temporada que ha valido todo su peso en oro, aunque le duela a los puritanos y trolls.