
Con el estreno de Lightyear, se me ocurrió que sería un buen momento para revisitar la saga de Toy Story y el efecto que tuvieron en su momento en el cine.
En verdad continúa siendo sorprendente que la Casa del Ratón, siendo tan líder dentro de la animación, jamás se les ocurrió crear una historia con aquel elemento que marca a todo humano en su niñez: un juguete.
Lo más cerca que Walt Disney estuvo de algo así fueron los cortometrajes de Santa Claus donde explotaba la fantasía del hombre en el Polo Norte trabajando en su fábrica de juguetes antes de partir el 24 de diciembre. Sospecho que Walt jamás se enfocó en los juegos de los niños y solo vio material dentro de la literatura, cosa que los herederos de su legado jamás pensaron en romper aun al tener su «renacimiento».
Por suerte John Lasseter y compañía amaban los juguetes y, como todo pequeño, se imaginaron mil aventuras pero se concentraron en la más importante de todas ¿Qué hacen los juguetes cuando se quedan solos en el cuarto?
Sabemos el éxito que tuvo esta película y como salvó a la industria del juguete inyectandole vida nueva durante una década en la que «el Nintendo» era el juguete principal de una nueva generación.
Con el paso del tiempo, las aventuras de Woody y Buzz se tornaron más adultas con preguntas que tal vez no te hiciste la primera vez que las viste, pero sin duda te las haz hecho ahora que creciste y las volviste a ver: ¿Quién eres? ¿De donde vienes? Y ¿Cuál es tu propósito después de cumplir tu gran meta?
Buzz y compañía son más juguetes y saben su lugar en el mundo, pero Woody va más allá, el vaquero se siente no solo el mejor amigo sino el guardián de Andy y darse cuenta de que ya no lo necesita, lo hace sentirse extraño. Tal vez lo pensó años atrás cuando descubrió de donde venía y que podía ser amado, pero así como Andy, Woody envejeció por dentro y la idea de terminar su misión es impensable.
Toy Story 4 es la película rara, la que para muchos no tiene lugar después de un final tan perfecto en la anterior cinta, pero el film tiene mérito mostrando a un personaje que, en su nueva vida, continúa creyendo que su labor es lo único que sabe y debe hacer, igual que sucede con infinidad de adultos que viven en un ciclo de repetición porque la sociedad les dijo que naces, creces, estudias, trabajas, tienes hijos y luego…te mueres ¿pero que pasa cuando llega el retiro y los hijos se mudan? ¿Se te acaba el propósito o buscas algo que despierte tu chispa de nuevo? En verdad, la cuarta película se aprecia más cuando eres más adulto.
Ahora estamos por ver una película que no continúa la historia ni nos cuenta algo que ocurrió previo a la llegada de Buzz al cuarto de Andy. LIGHTYEAR está siendo promocionada como «la película que Andy vio en el cine, que le hizo querer un juguete de Buzz Lightyear» y está bien, tal vez confunda a muchos que ahora piensan de forma lineal gracias a que lo de hoy son las franquicias cuyas secuelas son en servicio de una historia más grande, y la idea de una película dentro de una película no conecta, pero yo veo a Lightyear como una historia que celebra algo similar a Toy Story.
¿Recuerdas cual fue la primera película o serie que viste y te hizo correr a la juguetería para comprar el juguete del protagonista?
En mi caso las primeras series fueron Thundercats y He-man pero la primera película fue Las Tortugas Ninja. Ya era fan de la caricatura, pero la película fue harina de otro costal y corrí a comprar a Donatello (si, yo sé que tu tortuga favorita es un reflejo de tu personalidad ¡Donatello es cool y te callas!)
Esta es la mejor manera que tengo para justificar este…¿spinoff?, pendiente queda ver la cinta y descubrir que trasfondo hay en su historia pues, otra enorme diferencia entre Toy Story y Lightyear, es que la empresa que la produce ya no es la misma. Pixar comenzó dando un poco de profundidad a sus historias básicas pero no olvidaba que tenía que hacerte reír y tener mil frases que repetir, pero algo cambió por ahí de 2008 con WALL-E y ahora las historias de Pixar son más un estudio de algún conflicto emocional profundo interpretado a través de la animación así que no espero una simple caricatura vacía cuando vaya al cine en un par de días.
Toy Story es una parte importante de la historia del cine y de dos generaciones, yo tenía 13 años cuando salió la primera y ahorita ya estoy en el cuarto piso de la vida. Nuestros hijos nacieron y crecieron probablemente desde Toy Story 3 allá por 2010 (o antes si te comiste la torta entre tus noches de estudio) y si Lightyear tiene éxito, tal vez nuestros nietos nazcan para cuando se estrene la tercera película.
I’m Out!!!!!!