Sinopsis: Elliot es el perdedor más grande del mundo, enamorado de la chica más hermosa de su oficina está dispuesto a todo por salir con ella, incluso hacer un pacto con el diablo.

Opinión: Esta es una de esas película que si te pasan de largo probablemente no pierdas nada, pero si la descubres te va a alegrar la vida por siempre.

Una de las joyas de la brillante carrera de Brendan Fraser, donde demuestra la amenaza que era para Hollywood pues podía hacer drama y comedia con facilidad y aquí te doblas de risa con su visión del «amor perfecto».

Aprovechando que hoy es 6 del 6 del 2022 (2+0+2+2=6!!!) Hablemos de una de las representaciones más sexuales de Satanás en la pantalla grande. Elizabeth Hurley no es una buena actriz pero aquí quedó como anillo al dedo interpretando al diablo que todo hombre desearía vender su alma, es deliciosamente malvada, sarcástica y vestida con los disfraces más estereotípicos de cualquier fantasía masculina, si algún día necesita justificar su carrera en Hollywood, esta es la película que debe mostrar y su química con Fraser es como la de pocas.

Aunque parece algo muy simple, Brendan tuvo que sacar todo su arsenal pues en cada deseo se transforma en clichés de un narcotraficante colombiano (hablando perfecto español!), un estúpido jugador de Basketball (con un pequeñísimo problema bajo los shorts), El hombre más sensible del planeta y el escritor más perfecto (y gay de clóset) del mundo. Todos reflejando lo que creemos y anhelamos para ser felices en la vida.

Una de las cosas que más me sorprende es que los actores secundarios, los bullies de oficina que también aparecen en las vidas deseadas de Elliot, fueron actores destinados a explotar en Hollywood en los siguientes años, apareciendo en películas de gran escala como Inteligencia artificial, Hedwig and the Angry Inch o La Máquina del Tiempo, pero sufrieron lo que miles de actores sufren en Hollywood año tras año: se te dan tres oportunidades antes de tirarte a la basura y olvidarte. Fue la primera vez que noté lo terrible que es esa industria.

Insisto, Al Diablo con el diablo, no va a formar parte de ninguna lista de las mejores 50 comedias de todos los tiempos pero se va a convertir en una de esas películas elementales en tu vida para hacerte reír y sentir bien cuando te sientas mal.

I’m Out!!!!!