Sinopsis: Las sorpresas no paran en Downton Abbey cuando la Condesa recibe una villa francesa como herencia de un antiguo amante y Mary renta la casa principal como set para una película.

Opinión: No cabe duda de que más que una de las mejores series de la historia, Downton Abbey es la telenovela de telenovelas pues los matrimonios de tres hijas, la vida de los sirvientes y los problemas de una cena de gala no deberían habernos tenido tan atentos pero Julian Fellowes escribió una historia tan bien armada que por seis años nos tuvo pegados a nuestras pantallas pendientes de la vida de personajes igualmente bien armados. Es bueno saber que la segunda película cierra estas historias de forma tan satisfactoria.

A pesar de algunas ausencias importantes (sigo sin entender porque Lily James no quiso regresar) esta historia nos mete de nuevo al mundo de la familia Crawley y sus empleados como si no hubieran pasado tres años desde la última vez que los vimos. Pero como siempre, Fellowes captura como pocos el imparable paso del tiempo en todos ellos y mientras que al principio de la serie vimos los inicios del cine como distracción de las masas, es adecuado que la segunda película, que marca el final de la historia, ocurra durante «la muerte del cine mudo».

Admito que como fan de Julian Fellowes esperaba que de alguna manera tratase de unir Downton Abbey con Gosford Park, película por la que ganó el Oscar como Guión Original y que fue la base de la serie, metiendo a Ivor Novello como la estrella en ascenso que va a filmar a Downton, pero aunque eso no sucede me alegra que esa historia sea una metáfora de los grandes cambios sociales por venir.

La historia de la parte de la familia viajando a la villa francesa es el punto débil de esta cinta aunque no se desvía demasiado de lo que hemos visto por seis temporadas y una película pero los dos personajes nuevos aportan nada que no pudiera hacerse en Inglaterra. Lo que si es que Hugh Boneville se despide con su mejor intepretación de Robert Crawley desde la segunda temporada. Tristemente quien sale sobrando es el Señor Carson (Jim Carter), quien se vuelve una versión cómica de él mismo que insulta.

Pero esas son pequeñas fallas dentro del gran esquema de esta película donde poco a poco las historias de nuestros queridos personajes se van cerrando de una manera que cualquier fan habrían querido.

Downton Abbey: Una Nueva Era está llena de alegría, sentimentalismo y tristeza pero nos da algo que tanto la serie como los fans merecemos, un perfecto final que dejará a todos absolutamente satisfechos y eso es algo que muchas series desearían logran.

10/10

I’m Out…Tea and crumpets FOREVER!!!!!!