Tras la noticia del retiro de Bruce Willis por una enfermedad cerebral, me puse a pensar en las películas que ha hecho y por supuesto que clásicos como Duro de Matar, El Sexto Sentido, el Quinto Elemento y demás saltan primero pero de pronto recordé una de las comedias más oscuras y menospreciadas en donde su papel es pequeño pero demuestra la capacidad que tenía para hacernos reír cuando quería.

En inglés se llama DEATH BECOMES HER pero en México la llamaron LA MUERTE LE SIENTA BIEN y trata de dos actrices ya en sus cuarentas sintiendo el rechazo de los estudios para darles protagónicos hasta que descubren una fórmula misteriosa que rejuvenece y detiene el paso del tiempo.

Originalmente el guión era para una película seria que criticaba el culto a la personalidad que impera en Hollywood, echando en cara las injusticias que sufren las actrices y hasta las sociedades secretas dentro de la industria pero para llamar la atención de Meryl Streep y Goldie Hawn, algunas cosas fueron cambiadas para que fuera más una comedia oscura y originalmente Kevin Kline había aceptado el rol de Ernest, el cirujano plástico casado con Meryl que la engaña con Goldie, pero se salió por diferencias con el director Robert Zemeckis (el mismo de Volver al futuro).

En su lugar quedó Bruce Willis que para entonces ya era toda una estrella de acción y pocos recordaban que varios de sus proyectos antes de Duro de Matar eran de tintes cómicos por lo que su participación aquí con lentes gruesos y peluca falsa dejó a muchos sorprendidos pues creían que sería lo que desentonaría la comedia de dos grandes como Streep y Hawn.

Pero verlo como el pelele insignificante casado con Meryl Streep fue todo un shock para bien pues le dio permiso de lucirse en medio de dos actrices que no solo acaparan el escenario por si solas, también serían las que estuvieran siendo sometidas a horas de efectos especiales mientras él solo debía actuar.

La película incluso ganó el Oscar a Mejores efectos visuales que nos permitieron ver a Meryl con la cabeza volteada y a Goldie con un hoyo enorme en su estómago.

El papel de Bruce nos da la mejor moraleja pues nos explica que nunca es tarde para vivir y disfrutar los años que uno está en esta tierra y siento que a pesar de la reputación que Willis ha adquirido en estas décadas como alguien muy difícil para trabajar, ha disfrutado su vida pues en las redes sociales de sus hijas podemos ver el amor que da y recibe e incluso su relación tan especial con su ex Demi Moore. Así que, como le ocurre al personaje en esta película, espero que Bruce se recupere pronto y disfrute la vida por los años que le quedan.

Y sobre LA MUERTE LE SIENTA BIEN, en verdad se las recomiendo pues es una de esas clásicas que deben verse por lo menos una vez en la vida.