
La historia de un hombre atado al honor y las reglas del pasado mientras el mundo cambia alrededor y viendo como esto afecta su legado. El libro de Mario Puzo es una de las grandes historias de la literatura, un vistazo a la dinámica y tradiciones de los migrantes adaptados al sueño norteamericano mezclada con una épica Shakespeareana de drama y violencia.
La película ahora es una de las propiedades más valiosas del cine pero en su momento, como toda buena cinta, los altos mandos no la entendían y querían tratarla como cualquier otra película de la época. Las historias detrás de cámaras son tan crueles e inusuales que han inspirado una miniserie próxima a estrenarse que mostrará como querían eliminar lo italiano de la historia más italiana que se ha leído.
Francis Ford Coppola era miembro de ese pequeño grupo de jóvenes cineastas que estaban destruyendo la forma en que Hollywood hacía cine en la famosa «Época dorada» y aunque al final terminarían ganando, tuvieron que sacrificar todo para lograrlo. Tal vez hoy en día no sea tan recordado como sus compañeros Steven Spielberg, Martin Scorsese o George Lucas, pero Coppola fue el primero en romper las puertas de la «Ciudad Brillante» para que los demás pudieran entrar y su filmografía merece estudio más allá de esta famosa trilogía.
Coppola, siendo italiano de tercera generación, entendió el sentimiento de la historia, sabía que era importante mostrar y qué podía quedarse fuera de la adaptación y a pesar de chocar día y noche contra ejecutivos que cuestionaban cada una de sus decisiones, logró plasmar algo verdaderamente genuino.
El valor de El Padrino no está en la violencia que ahora es una lección para todo cineasta sino en entender a los personajes y como se relacionan, es por eso que el director pasa 30 minutos enfocado en la boda de la hija de Vito Corleone sin mostrarte el verdadero conflicto de la historia, porque debes conocer a los personajes antes de verlos en acción. Tenemos que entender que Vito es violento solo cuando es necesario pero más que eso es amigo, consejero y padre, su primera reacción es de molestia cuando uno de sus amigos lejanos le pide que mate a dos jóvenes, en contraste está más que feliz de ayudar a su amigo panadero a conseguirle una visa al novio de su hija o ayudar a su ahijado a conseguir un papel en una película, sabemos que ambos casos implican corrupción pero es muy diferente a pedirle que mate. También vemos recibir como amigo a un hombre que, momentos antes, nos fue descrito como uno de los asesinos más peligrosos. Coppola y Puzo armaron una secuencia tan perfecta pero que va en contra de todo lo que se te enseña en una escuela de cine. Para cuando arranca la historia ya sabemos quien es quien y como reaccionarán a cada situación.
Elegir a sus actores también fue un caso complicado pues el estudio no quería trabajar con Marlon Brando y Coppola, inamovible en su decisión, comprendería porqué pero lograría la mejor actuación de la carrera de uno de los grandes actores de la historia. Por otro lado, encontrar a los hijos de Vito Corleone necesitó de una búsqueda entre todo el talento jóven que estaba llegando a Hollywood. Por un momento Christopher Walken y Martin Sheen serían Sonny y Fredo mientras James Caan interpretaría a Michael quien se enamoraría de Faye Dunaway como Kay
Por suerte encontrar a Al Pacino resultó en una espiral que llevó a encontrar a los actores perfectos para los papeles correctos aunque también, como Pacino ha dicho en varias ocasiones, vivió con el constante miedo de ser despedido en cualquier momento.
El legado de El Padrino se puede ver en la influencia que ejerció en una de las épocas más experimentales y oscuras de Hollywood y como toda película de mafiosos o relacionada con drogas trata de tomar algo prestado de esta película. Elevó a todos los involucrados a superestrellas pero eso no significó que permanecerían lo suficiente para volverse leyendas y ahora fuera de Pacino y De Niro, los demás han ido perdiéndose en las filas de un negocio tan cruel como el cine.
Han habido grandes películas dentro del género pero lo más cercano que hemos llegado a estar de algo similar fue cuando David Chase creo The Sopranos y hasta esa le rinde tributo a la familia Corleone.
10/10
I’m Out!!!!