En un Hollywood que no sabe hacer otra cosa que explotar las ideas del pasado, llega esta nueva versión del clásico de terror Candyman. Un hombre, que si es invocado, se encarga de quitarte la vida al invocador, esta historia consiste en un artista venido a menos que decide utilizar la leyenda urbana de Candyman para su nueva exhibición; provocando que la historia vuelva a cobrar vida y el nuevo sucesor de este ente descubra las consecuencias de sus actos.

Jordan Pelee ha demostrado tener buenas intenciones, con Get Out demostró que puede ser un gran guionista pero con Us nos dejó claro que las buenas ideas no siempre se concretan, ahora nos trae esta versión de Candyman. Un guion sin chiste que aprovecha la película anterior para “causar terror” mezclada con una dirección que no supo como contar esta historia, dando como resultado una de las películas más lentas y aburridas del año. Desgraciadamente este es un trailer que me emociono pero me desilusiono por completo.

Pasamos más de una hora redescubriendo la leyenda , para terminar con una media hora de “miedo” que nos deja muy insatisfechos, lo que parecía una buena idea se convierte en algo genérico, Hollywood necesita urgentemente buscar ideas nuevas y dejar el pasado en el pasado ya que el cine se está volviendo un producto sin chiste.

0/10