Hace unas semanas les trajimos nuestra opinión de la primera temporada de este show, ahora con el estreno de la segunda solo me queda decir, que esto fue producido por cumplir contrato, ni las personas que lo realizan tenían interés en hacerlo. La historia de Payton se vuelve monótona y bastante predecible, se nota que no tenían mucho que contar, ya que existen dos capítulos de relleno y una reducción de duración. Esta segunda historia nos narra como Payton lucha por ser un verdadero político compitiendo contra una mujer que lleva 33 años en el juego, volviéndose una campaña sangrienta donde todo es posible.
Creo que lo único bueno de este show es el mensaje sobre la política actual, en cualquier país, donde la gente mayor no está sabiendo atraer a la gente más joven, en algo tan sencillo como votar, ya no logran hacer que la población de menor edad decida participar, este detalle hace de la serie algo más digerible puesto que muestran que las ideas de siempre ya no funcionan y que los nuevo votantes están interesados en una nueva forma de ver el planeta. Fuera de esto, todo a gira alrededor de su protagonista quien hace uso de sus personajes secundarios cuando le conviene y rellenando espacio con situaciones que no aportan absolutamente nada.
The Politician no es un buen show, ni siquiera es uno tan malo que es bueno; simplemente es un programa que no logra entrar en la casa de todos. Murphy trato de hacer un show juvenil de política que solamente aburre y le veo difícil una tercera entrega a pesar de las grandes estrellas que tiene. Finalmente, admito que si algo te hace terminar de verla es la fabulosa Bette Middler; quien sin duda sigue siendo una de las mejores comediantes del medio.