¿Podemos cambiar al mundo sin recurrir a la violencia?
En esta cinta animada, tenemos al mejor espía del mundo Lance Sterling (Will Smith) recurriendo a todas las armas y gadgets que hemos visto en infinidad de películas de espías, pero Walter (Tom Holland), un extraño científico que trabaja para la misma agencia, se la pasa creando armas no letales pues tiene la idea de que el mundo necesita ser menos violento porque al final del día no somos buenos contra malos sino simples humanos tratando de vivir en el mundo.
No soy muy fan de Tom Holland y Will Smith ha tenido una horrible década actoral, pero debo admitir que esta película es lo más entretenido que ambos han entregado. Aunque Smith sigue muy apegado a su papel de afroamericano juvenil de barrio en cualquier situación, si hace de Sterling un personaje odioso al creer que puede hacer todo él solo y que la violencia es necesaria para derrotar a los villanos mientras que el personaje de Holland puede parecernos muy simplón o «millennial» en su forma de pensar pero en cierta forma tal vez los anticuados somos nosotros al no querer abrirnos a una nueva forma de ver el mundo.
Esto no quiere decir «abrazos no balazos» pero si una forma de educar a las nuevas generaciones a evitar la violencia porque esta genera más y jamás saldremos del círculo vicioso.
La película tiene momentos muy chistosos con Sterling convertido en paloma que harán reír a chicos y grandes, pero también tiene muy buenas escenas de acción.
I’m Out!!!!!