Para alejarse un poco de su imagen como Daenerys en Game of Thrones, Emilia Clarke ha elegido proyectos cinematográficos que reflejen más su alegre personalidad real que ha ganado a todos, pero la realidad es que dichos proyectos terminan siendo una desilusión total. Por suerte esta película no cae en esta categoría y todo se debe a que hace hasta lo imposible para alejarse de la fórmula de la «comedia romántica navideña».

La historia escrita y producida por Emma Thompson (quién debió dirigir también en lugar de respaldarse en Paul Feig) cuenta sobre Kate, una mujer en la parte más baja de su vida y autoestima, tratando de sobrellevar la monotonía de trabajar en una tienda de artículos navideños bajo las órdenes de una fría mujer. Kate además es esa amistad que quieres pero siempre termina haciendo algo que te hace alejarte de ella y ni hablar de la pobre relación con su familia. Todo eso parece cambiar cuando se topa con el misterioso Tom, que le hará ver que las segundas oportunidades se pueden usar para mejorar la vida de los demás.

Una vez más el trailer mintió y esto no es una comedia romántica, tampoco es un tremendo drama pero si se trata de una exploración de como enfrentamos la vida tras una enfermedad u operación de vida o muerte. Kate siente que desde su transplante de corazón, le quitaron una parte importante de su personalidad y siente como extraño el corazón que ahora tiene, su vida es gris y deprimente así que ¿Para qué poner un poco de esfuerzo? y aunque el personaje no es nada agradable por la mayoría de la película, Emilia hace un tremendo trabajo personificando todos estos sentimientos que muy poca gente puede relacionar o tal vez mucha más gente de la que piensas se siente así de deprimida.

La idea de esta historia proviene de la popular canción «Last Christmas» del grupo ochentero WHAM! de donde salió George Michael, este tema es la canción navideña más popular en Inglaterra desde 1984 y reaparece entre los primeros lugares de popularidad de las estaciones de radio y demás servicios de música en el país año tras año. Tal vez el homenaje de Emma Thompson a su amigo George es un poco exagerado en el uso de canciones del músico pero también sirve para que nuevas generaciones conozcan el rango que tenía Michael.

La película no es perfecta y peca de brincar de género todo el tiempo entre romance, comedia, drama, etc y personajes como la mamá yugoslava de Kate parece más de caricatura contra el resto de la historia, pero también hay que aplaudir que la cinta trata de tocar temas importantes como la identidad nacional vs Brexit y el apoyo a las personas sin hogar, que curiosamente era algo que George Michael hizo por décadas de manera anónima.

El twist será algo que algunos van a adivinar casi de inmediato pero me sorprendió que muchos en mi función fueron tomados por sorpresa ante la revelación y eso dice algo sobre esta pequeña cinta.

Last Christmas es una de esas películas que definitivamente sirven para pasar el rato en estas fechas y aunque no es una inyección de alegría constante, sales sintiéndote bastante bien al momento que aparecen los créditos así que deberían darle una oportunidad.

I’m Out!!!!!!