Han pasado décadas desde que vi un film noir de detectives tan bueno como este, desde L.A. Confidential para ser exactos, y ese es el mejor elogio que puedo darle a esta adaptación dirigida por Edward Norton.
La historia trata sobre un detective con Síndrome de Tourette que trata de averiguar la razón detrás del asesinato de su mentor en Nueva York de los años cincuenta rodeado de Jazz y mucha corrupción.
Debo ser honesto, esta es una película bastante entretenida que te mantiene interesado todo el tiempo, pero Norton, quien dirige, actua y escribe el guión, peca de algo básico en cualquier adaptación de una novela al cine: no supo que editar.
Las casi tres horas de duración podrían ser más soportables si hubiera dos momentos más con disparos o persecuciones como en el principio pero esta es una verdadera historia de detectives donde la gente habla todo el tiempo y hay demasiados momentos de esperar y observar por lo que llega un momento en el que la cinta puerde el ritmo y hace que la segunda mitad se sienta mucho más lenta y pesada.
Pero eso no debe desmotivarlos para disfrutarla, además de ver grandes actuaciones de Edward Norton, Alec Baldwin como un villano bien estructurado, Gugu Mbatha Raw y Willen Dafoe. Todo circulando alrededor de la brutal y dolorosa realidad de la modernización de una ciudad, este tema seguramente dividirá opiniones y creará debate.
I’m Out!!!!