¿Quis custodiet ipsos custodes?
Watchmen, de Alan Moore y Dave Gibbons, es uno de los cien mejores libros del siglo XX, no cómic sino libro. La historia es tan buena que muchos expertos del mundo de la literatura lo consideran la única historieta que sobresale de su género y eso nos dice algo sobre tocar esta historia para cualquier otro medio.
Cuando Zack Snyder decidió arriesgarse a hacer la película, muchos lo tacharon de inmediato como herejía pero yo sigo manteniendo que es una de las mejores películas del género y en mi opinión arregla el final del cómic.
DC cómics ha tratado de trabajar precuelas y secuelas de Watchmen que van desde mediocres a interesantes pero finalmente son innecesarias.
Ahora tenemos esta serie de la mente de Damon Lindelof, responsable de Lost y The Leftover que se desarrolla en 2019 dentro de la línea temporal alterna del cómic donde el mundo siguió girando tras el ataque de la «bestia interdimensional» pero cosas como los teléfonos celulares y el internet jamás fueron inventados. Donde los policías optan por cubrir sus rostros con máscaras tras una masacre ocurrida tres años atrás por un grupo terrorista adorador de Rorschach, pero también tienen restringido el uso de armas de fuego.
Lo primero que se nota en este capítulo, y que me enganchó de inmediato, es que todo se siente vivido, cada minúsculo detalle se siente pensando y anotado en la biblia de la serie y no solamente aventado al azar como en muchas otras. Eso modifica la historia desde el inicio y nos obliga a vivir dentro de la realidad de estos personajes y no dentro de la nuestra.
La ganadora del Oscar, Regina King, interpreta a Angela Abar, una policía que decidió retirarse de la Fuerza pero que continúa apoyando como la vigilante Sister Night, la cual es certera y brutal en sus técnicas. Me encanta que aquí puedes ver las arrugas en la cara de los personajes pero al mismo tiempo te das cuenta que siguen pateando traseros, algo tan diferente a lo que vemos en ciertas películas de superhéroes.
Hay un cierto aire de rareza dentro de este capítulo, como que todo parece normal dentro de esta realidad alterna peeeero ciertos detalles se sienten fuera de lugar y también nos invitan a seguir viendo para descubrir el trasfondo.
La serie tiene muchos «easter eggs» del cómic original que los fans pasarán horas encontrando.
Personalmente siento que el final de este capítulo hizo algo que no me gusta ver en las series pero espero que haya una razón de peso para haber corrido ese riesgo. Claro que esto no quita que presiento estamos ante otro gran éxito de HBO.
I’m Out!!!!