Downton Abbey ha sido una de las series más populares de esta década en todo el mundo gracias a su perfecto manejo de drama, comedia y eventos históricos alrededor de una familia adinerada y los empleados que atienden su imponente mansión a principio de siglo.
Por seis temporadas, esta creación de Julian Fellowes nos entregó personajes muy bien armados que se enfrentan a la realidad de los grandes cambios sociales de una forma más cercana a la de cualquier persona y es gracias a eso que logró conectar con su creciente audiencia.
Ahora, años después de haber concluido y gracias a las incansables peticiones de los fans, Julian Fellowes y el grupo de actores regresaron para darnos una película que cierra a la perfección esta gran historia sin perder la esencia de lo que hizo grande al show.
Los Crawley reciben la noticia de que el Rey de Inglaterra, Jorge V, visitará Downton como parte de un tour de buena voluntad, que si revisamos la historia se trata de un tour para asegurarse de que todos los nobles y sus súbditos no quieran hacerles lo que le acababa de pasar a los Romanoff en Rusia. Esto desata todo tipo de nervios en la mansión.
Lo más maravilloso de esta película es que tiene la habilidad de sentirse tanto como un gran capítulo de la serie y como una película independiente, lo cual no me resulta extraño considerando que Julian Fellowes escribió el guión de Gosford Park (una de mis películas favoritas e inspiración para Downton Abbey) donde parece simplemente seguir la vida de nobles y sirvientes de una casa por tres días sin mayor contexto. Es simple pero muy efectivo
Además el ver a los personajes más establecidos en sus nuevos roles como nos los dejaron al final de la serie es tan natural, ver a Mary ahora como una mujer demostrando su habilidad para administrar una mansión como Downton o a Tom conservando su lado democrático pero habiendo madurado lo suficiente para entender que los ricos no siempre son todos iguales.
Pero quien de nueva cuenta se lleva las palmas es Dame Maggie Smith que continúa siendo un cofre lleno de sorpresas y secretos como la Condesa Violet Crawley con su infinidad de frases dignas de inundar las redes sociales y desarmar a cualquiera pero con un tremendo corazón que te deja gritando «¡Oscar!» y no dudo que pueda llegar a conseguir por lo menos la nominación.
A pesar de todo lo que funciona en esta película, siento que la historia de los sirvientes tiene las partes más débiles de la película y es que por más que me encante ver a Molesley, la verdad es que no había motivo para traerlo de regreso y simplemente dispensar de su trabajo como maestro para tener la oportunidad de servir a la familia real. Entiendo que es todo un honor digno de contarse a futuras generaciones pero algunos de los que regresan no tienen mucho que hacer para avanzar la trama y por momentos arrastran la película.
Downton Abbey se despidió años atrás de la mejor manera posible pero a diferencia de otras series que han lanzado su película, esta no se siente de más, es un placer volver a ver a estos personajes, es tierno y divertido aunque no siempre perfecto pero es el perfecto epílogo.
I’m Out!!!!