Como toda buena compañía Netflix explota aquello que de alguna manera ya funciono una vez y a pesar de que se ha ido perdiendo el número de gente que ve este show sin duda el morbo sigue manteniéndose vivo. Esta nueva temporada es más un reboot que una manera de seguir con la misma historia, aquí tenemos a los mismos personajes pero en una situación tan independiente a  lo anterior que por momentos logra ser bastante rescatable. Tras ver estos nuevos capítulos pude llegar a la conclusión de que este teen show tiene muy buenas intenciones, toca temas que en verdad importan hoy en día o cosas de las que pocos programas logran trasmitir a los jóvenes el problema es que está muy mal escrita al grado de que se enfoca en todo menos en lo que deberían.

Tenemos episodios que hablan sobre la presión de la sociedad por el aspecto físico masculino, el exceso de protestas que han llegado al grado de lo ridículo, las drogas o el constante abuso de padres de familia  a los menores o como todo ser humano comente errores pero puede aprender de ellos y salir adelante. El detalle esta que nunca logran crear un guion donde todo esto se exponga en verdad y quede plasmado en tu cerebro. La historia de Bryce es lo menos interesante de este show, al igual que la temporada pasada la trama central juega en segundo plano para exhibir a cada uno de sus protagonistas, el detalle está en que quieren hacer a Bryce un mártir en lugar de un ser humano que busca cambiar para ser alguien mejor ahora que el mundo le ha dado la espalda, esto combinado con la mala actuación de Justin Prentice, hace que sientas que solo están buscando justificar a un violador.

Este es otro problema, entiendo que las víctimas de violación se encuentran donde menos lo esperamos, que son más de las que pensamos pero esta horrible acción no puede ser tu problema siempre, todo lo que rodea a estos personajes tiene que ver con violaciones y definitivamente esta es la escuela donde NADIE se da cuenta que la mitad de la institución es una víctima de esto. El ver que uno de los personajes principales mato al villano no es intrigante y cuando llegas a un final tan flojo es notorio no supieron que hacer. Ani interpretada de manera irritante por Grace Safi, es de esos personajes que te hacen pensar que por personas así la sociedad no avanza y todo el mensaje que mandan se pierde por las acciones que ella toma. Ani es la viva representación de un ser humano sin escrúpulo ni respeto por cualquiera que la rodee, todo lo que uno puede hacer mal o incorrecto es exactamente lo que este personaje hace.

Pero como dije al inicio no todo es malo, debo darle un aplauso a los escritores por crear un personaje tan complejo como Justin, uno de esos que tiene demasiado pasado que le ha marcado de diferentes maneras pero que en verdad esta luchando por tener algo mejor y la vida le da una segunda oportunidad que tiene pavor de perder. También la historia de Monty, quien a pesar de ser usado como un mueble en verdad tiene potencial por tener un backstory más fuerte. Finalmente debo decirles que si buscan una razón para ver esta temporada esa es Tyler y las impresionantes escenas que Devin Druid entrega, este es el mejor actor de la serie y me atrevo a decir que merece un premio. Este personaje toca un tema muy delicado y en más de una ocasión te hace dudar pero finalmente es la gema escondida dentro de un programa que debe ya terminar.