Este año he visto dos cosas que jamás pensé ver, la primera película basada en un videojuego que vale la pena y ahora la primer película adaptada de una caricatura para bebés que le da las buenas y las malas a la más reciente película de Indiana Jones.

Dora y la Ciudad Perdida sabe que debe usar el material de la caricatura original pero moldearlo para ser una buena película familiar que no se sienta estúpida. Dora es ahora una adolescente aislada del mundo moderno cuyos padres deciden mandarla a Los Ángeles con sus tíos y su primo Diego para aprender a socializar y como es de esperarse, Dora resulta un bicho raro en la jungla que es cualquier secundaria.

Esta parte de la película me recordó a dos divertidas películas que tocan el mismo tema, The Brady Bunch Movie y Legalmente Rubia, donde los personajes son tachados como raros simplemente por ver la vida con un inquebrantable filtro de felicidad y actitud positiva ante una sociedad amargada, una tremenda lección para pequeños, adolescentes y adultos sobre como no debemos someter nuestra personalidad para cuadrar con la sociedad sino que debemos cambiar a la sociedad para aceptar todo tipo de personalidades.

Isabela Moner es una revelación como Dora, pocas veces se ve a una actriz tan joven abrazar cada detalle de su personaje y volverlo suyo pero Moner se pierde en Dora y te contagia con su actitud. Esta chica ha logrado ese papel que servirá como trampolín para su futuro.

La forma en que la historia utiliza detalles de la caricatura por más minúsculos que sean es algo que la enriquecen aunque no seas un experto en Dora La Exploradora y la forma en que usan a los personajes fluye tan natural y divertido ¡porque vaya que esta película es divertida!

A pesar de sus carencias en el idioma inglés, esta es la primera vez en la carrera de Eugenio Derbez que el comediante sabe bajar el exagerado tono de su comedia para generar más risas y aquí, como Alejandro, es verdaderamente chistoso sin que en un momento digamos «eso es típico chiste Derbez».

Dora y la Ciudad Perdida es chistosa, entretenida, tierna y con grandes mensajes para toda la familia, una que definitivamente no se pueden perder.

I’m Out!!!