A pesar de ser un libro bastante popular en su época, «El Libro de la Selva» de Rudyard Kipling ha sido sustituido casi por completo por la versión animada creada por Walt Disney y aunque debo admitir que es una de sus grandes película, como adaptación es una muy pobre.
Andy Serkis entrega su segundo trabajo como director con una adaptación más fiel a los cuentos de Kipling. Aquí Mowgli es un extraño entre su manada de lobos, jamás perteneciendo por más que trata, el oso Baloo no es el vago amoroso de Disney sino un duro maestro miembro de la manada que enseña a Mowgli duras lecciones de vida. Esta jungla se siente mucho más vivida, más peligrosa y Serkis logra dar personalidad a cada uno de los personajes y plantea las reglas mucho más de acuerdo a la dureza de la jungla que en el intento de Jon Favreau que trató de dar madurez a la versión animada.
Los humanos juegan un papel más importante aquí y demuestran que las cosas no son mejores con otro grupo de personajes, hay diferentes matices que forjan el caracter de Mowgli y hacen de esta una gran película.
Aunque resultó muy dura la repentina decisión de Warner Bros., entiendo porque la movieron a Netflix, el público en general está tan acostumbrado a lo hecho por Disney con las canciones y las personalidades joviales de los animales que verlos de manera más seria los haría rechazar esta pelicula por completo, lo cual sería un desastrozo error. En Netflix puede encontrar otro tipo de audiencia con mayor calma y entendimiento y podrá llegar a convertirse en una gran película de este año.
9/10
I’m Out!!!!!!